Justo en el cruce de las rutas provinciales 1 y 28 encontramos unas viejas edificaciones que resultaron ser la Esquina de Festa o el Boliche de Festa, el sitio está abandonado así que pude recorrer algo de su interior. Nuevamente la tormenta ayudó a darle un cariz más dramático a las tomas.
Digno final para una jornada que había comenzado signada por la incertidumbre, ahora tan solo me quedaba recorrer General San Martín para mañana, día 6, partir temprano rumbo al mar.
Digno final para una jornada que había comenzado signada por la incertidumbre, ahora tan solo me quedaba recorrer General San Martín para mañana, día 6, partir temprano rumbo al mar.
Si seguimos la interminable recta de la provincial 28 llegamos al Parque Nacional Lihuel Calel
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