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domingo, 29 de enero de 2012

La Mar Chiquita, tierra de cielos, Córdoba, Argentina

El último post dedicado a los cielos de la Mar Chiquita, cielos que me devolvieron tonos que creía perdidos, después de tanta ciudad pintada con grises y colores publicitarios. Un consejo para el final, cuando alguien ande por estos salitosos y solitarios parajes pampeanos, siempre cámara a cuestas, sobre todo cuando de amaneceres y ocasos se trata.
Bueno, caminos pampeanos, quizás nos crucemos nuevamente, no se cuando, no se donde.

2 comentarios:

  1. Mestro!!! Qué fotografías estas!!! Preciosas, una mejor que la otra. Felcitaciones...A ver con qué nuevo lugar sorprendes ahora. Mar Chiquita me encantó. Amo Córdoba (que dicho sea de paso, la pasó muy mal con el temporal de estos días!) Saludos.

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  2. Gracias Maestra!!!, ante la imposibilidad de crear arte con mis propias manos, me remito a capturar escenas, pinturas desarrolladas por la naturaleza, será por tal motivo que siento profunda admiración por quienes consiguen emocionarme con sus producciones artísticas, como lo hace una puesta de sol.

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