domingo, 1 de diciembre de 2013

Empalme Piedra Echada, Buenos Aires, Argentina

La 76 avanza desolada muy lejos del pintoresquismo y cierto movimiento que adquiere cuando cruza la Sierra de la Ventana, de repente aparecen a nuestro lado una estación, un cabin muy importante y varios tableros de señales, marcando que allí ocurría algo relevante en el sistema ferroviario del pago chico.
Toda esa señalización en el medio de la pampa nos ubica en el Empalme Piedra Echada, partido de Puán. La estación perteneciente al ramal secundario López Lecube-Villa Iris fue construída por el BAP cuando administraba al Ferrocarril Bahía Blanca al Noroeste, la longitud de dicho ramal mismo es 43 kilómetros y vincula la vía a Toay del FCBBNO con la vía a Catriló del BAP. En el kilómetro 102,8 de la vía principal se construyó el empalme en donde nos encontramos en éste momento. El pequeño pero fundamental ramal fue inaugurado el 11 de mayo de 1909 en forma definitiva. Hoy en día a pesar que sus rieles se encuentran concesionados al FerroExpreso Pampeano ningún tren los surca.
Toda la región pampeana está surcada por estas verdaderas costuras o cicatrices que representan los ramales abandonados, en verdad se me hace muy difícil vincularlos en el espacio ya que hay tantos y a veces la información es tan contradictoria que en algunos casos me supera.
Seguimos viaje, ya pasadas las cinco, ahora le toca el turno a Felipe Solá, las expectativas están puestas ya que se trata del pueblo natal de mi anfitrión.

2 comentarios:

  1. Piedra Echada recibe su nombre de un afloramiento granítico que fuera explotado en su momento y del cual provienen los adoquines que, por ejemplo, pavimentan las calles de López Lecube. Ver información en el libro de María Larralde por los 100 años de López Lecube.

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por la información, siempre resulta muy valiosa.
    Saludos!

    ResponderEliminar